Hoy hermanos míos

entre alcohol yo me confieso.

Si mal no me expreso,

admito quererlos tanto,

es por eso que mi llanto

no son dos lagrimitas.

Es que tanto me limita

nuestro Dios el ser supremo,

que hasta creo que su anhelo

es llevarme y necesita

que les diga compañeros,

que los espero en el cielo.

Y si sirve de consuelo,

sepan que a mi vida

La hicieron arte, timba y poesía.

Y que cada uno de los días

que pasé con mis gomías

fue mejor que cualquier cielo.

Hoy hermanos míos

que allá me solicitan...

Santos y virgencitas,

los suyos y los nuestros.

Hoy hermanos míos

mi corazón yo les muestro.

Porque para mí lo nuestro

es de lo único que me fío.

Y las noches de frío

su cariño es mi abrigo.

Y las noches de desvelo

su recuerdo es mi sueño.

Pero hay noches que no quiero,

olvidar lo que los quiero.

Qué voy a hacer

más que extrañarlos?

Más que pensarlos

y menos que amarlos?

Qué voy a hacer

más que recordarlos?

más que admirarlos?

Menos que mi amor

no pueden merecer..

Santiago Leo

Tengo 36 años, soy de Quilmes, BsAs y soy lic. en Publicidad, jardinero y paisajista. Me gusta el arte y suelo volcar mis sentimientos en forma de escritura poética.