Desde pistas de baile cinéticas y bicicletas fijas que generan la energía para producir sus shows hasta compromisos de reforestación. Así es como la banda hace que sus conciertos de Music of the Spheres World Tour sean lo más ecológicos posible.

Durante el 2019, Chris Martin, cantante de la banda, anunció que no seguirían haciendo giras hasta encontrar la manera de que tengan un impacto positivo en el medioambiente.

De más está decir que es una tarea muy difícil hacer que una gira mundial de música sea respetuosa con el medio ambiente, pero Coldplay se está esforzando para poder lograrlo. Cuando la banda anunció su nueva gira de apoyo a su álbum más reciente, Music of the Spheres, hizo varias promesas medioambientales y anunció iniciativas de sustentabilidad para reducir su huella de carbono en la mayor medida posible.

Los esfuerzos de Coldplay se basan en tres principios: Reducir, reinventar y restaurar. El primero hace referencia a reducir nuestro consumo, a reciclar y a recortar nuestras emisiones de CO2 en un 50%. El segundo, por su parte, a apoyar las nuevas tecnologías ecológicas y a desarrollar métodos de gira sustentables con pocas emisiones de carbono. Y por último, el tercero, se refiere a hacer que la gira sea lo más beneficiosa posible para el medio ambiente, financiando una gran cantidad de proyectos dedicados a la protección de la naturaleza y extrayendo una cantidad de CO2 significativamente mayor que la que produce la gira.

Coldplay via instagram

Las instalaciones de los conciertos de Coldplay incluyen pistas de baile cinéticas y bicicletas estáticas que canalizan energía directamente de los fans hacia las baterías que alimentan diferentes artefactos del espectáculo. Dichas baterías son productos de una colaboración entre la banda y BMW Group. El grupo alemán fabricante de automóviles y motos de alta gama desarrolló más de 40 baterías reciclables llamadas BMW i3 a los fines de que proporcionen energía durante los recitales en vivo y, a su vez, de que la banda reduzca su huella de carbono durante el tour.

Las bicicletas cinéticas son una de las fuentes de energía de cada concierto

Guy Berryman, bajista de la banda, se ha expresado en relación a estos mecanismos diciendo que no quieren dar la impresión de ser serios o de imponerle una responsabilidad a sus fans, sino todo lo contrario. Es más, sostiene que la forma de que funcione exitosamente es si la gente lo ve como una oportunidad de hacer algo divertido.

Por otro lado, cuando uno piensa en las giras musicales no suele contemplar la contaminación emitida por los viajes de la banda. Pero ellos sí. Es por este motivo que planificaron su gira de manera tal que la mayoría de sus viajes sean de trayectos cortos y por tierra, y, en lo posible, en vehículos eléctricos. Para aquellos casos en los que es inevitable tomarse un avión, decidieron que viajarían en aerolíneas comerciales y que, además, pagarían un recargo por el uso del Combustible de Aviación Sostenible (Sustainable Aviation Fuel - SAF).

Otro de los tantos cambios que ha realizado Coldplay durante este tour y que no es fácil de visualizar, está relacionado con su escenario. La estructura de este último, a diferencia de giras anteriores, está armada con materiales reutilizables y con acero reciclado. En cuanto al sistema de iluminación específicamente, todas las luces que uno logra ver son de bajo consumo y, en cuanto a los equipos de sonido, utilizan unos que consumen un 50% menos de energía que los que utilizaban antes.

Si llegaron hasta acá, seguro se preguntarán ¿qué hay de las pulseras LED, los fuegos artificiales y el “papel picado”? En cuanto a las pulseras LED, más allá de ser reutilizables -sí, al finalizar el concierto hay que devolverlas-, están hechas de materiales reciclados. El “papel picado” que utilizan es 100% biodegradable y los fuegos artificiales tienen una menor carga explosiva y, al mismo tiempo, una menor cantidad de químicos nocivos que los “tradicionales”.

Por último, a pesar de todas las medidas tomadas por Coldplay, es cierto que su gira tendrá una huella de carbono significativa. Ellos lo saben y, como si las medidas mencionadas anteriormente fueran pocas, también se han comprometido a plantar y proteger millones de árboles nuevos, incluyendo uno por cada entrada vendida.